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Los virus de la influenza (gripe) generalmente se propagan en otoño e invierno, con un pico de actividad entre diciembre y febrero. Vacunarse en otoño puede reducir sus probabilidades de contraer gripe.

La gripe es una enfermedad grave, causada por los virus de la influenza, que puede llevar a la hospitalización e incluso la muerte. Cada temporada de gripe es diferente, y los impactos sustanciales en la salud pueden variar ampliamente de una temporada a otra, y algunas temporadas de gripe son peores que otras. Su mejor defensa es la vacunación, que brinda protección contra la gripe y sus posibles complicaciones.

Las vacunas contra la gripe están aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. para prevenir la influenza, y proporcionan beneficios importantes. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estiman que durante la temporada de gripe 2021-22 hubo:

• 8 millones a 13 millones de enfermedades por gripe.
• 3,7 millones a 6,1 millones de visitas médicas relacionadas con la gripe.
• 82.000 a 170.000 hospitalizaciones relacionadas con la gripe.
• 5.000 a 14.000 muertes relacionadas con la gripe.

La vacunación contra la gripe previene millones de enfermedades relacionadas con la gripe y visitas a un profesional de la salud. Por ejemplo, según los CDC, durante la temporada de influenza de 2019-2020, la vacunación contra la gripe previno aproximadamente 7,5 millones de enfermedades por influenza, 3,7 millones de visitas médicas asociadas a la influenza, 105.000 hospitalizaciones asociadas a la influenza y 6.300 muertes asociadas a la influenza.

Para encontrar una vacuna contra la gripe cerca de usted, visite esta página.

El COVID-19 y la gripe

Es probable que los virus de la gripe y el virus que causa el COVID-19 continúen circulando juntos en otoño e invierno. La vacuna contra la gripe no previene el COVID-19. La FDA ha aprobado dos vacunas para la prevención del COVID-19 y ha emitido autorizaciones de uso de emergencia (emergency use authorizations, EUA) para otras vacunas para la prevención del COVID-19. Para obtener la información más reciente sobre las vacunas y los refuerzos contra el COVID-19, visite esta página de la FDA.

Las vacunas contra la gripe están aprobadas por la FDA para la prevención de la enfermedad por influenza y para proteger contra cuatro cepas diferentes del virus de la influenza. Vacunarse para prevenir esta enfermedad puede ayudar a mantenerlo fuera del consultorio médico para una visita por enfermedad y preservar los recursos de atención médica para pacientes con otras enfermedades y afecciones médicas. La FDA desempeña un papel clave para garantizar que las vacunas contra la gripe seguras y eficaces estén disponibles en todas las temporadas de gripe.

Los virus de la gripe se propagan por gotitas cuando las personas infectadas con gripe tosen, estornudan o hablan. La gripe también puede propagarse cuando una persona toca una superficie u objeto que tiene virus de gripe y luego se toca la boca, la nariz o los ojos. 

Los CDC recomiendan que los niños mayores de 6 meses y los adultos se vacunen contra la gripe a fines de octubre. Incluso si espera hasta después de octubre, vacúnese. La inmunización seguirá siendo beneficiosa y proporcionará protección. Para obtener más información sobre las recomendaciones de vacunas contra la gripe, visite esta página de los CDC. 

Si ya ha estado enfermo de gripe esta temporada sin vacunarse, la vacuna contra la gripe sigue siendo importante porque ayuda a prevenir enfermedades causadas por cuatro cepas diferentes de virus de la gripe. Presumiblemente, usted estuvo infectado con un tipo de cepa del virus de la gripe, por lo que la vacuna ofrecería protección contra las cepas que aún no ha tenido.

Una vacuna contra la gripe es la mejor prevención

Las temporadas de gripe y su gravedad son impredecibles. La vacunación anual es la mejor manera de prevenir la influenza en personas a partir de los 6 meses de edad.

Una vacunación anual para prevenir la gripe es la mejor manera de reducir el riesgo de contraer la gripe y contagiarla a otras personas. Cuando más personas se vacunan, es menos probable que los virus de la gripe se propaguen a través de una comunidad.

La vacuna generalmente cambia cada año y contiene las cuatro cepas del virus de la gripe que se espera que circulen y causen enfermedades en los EE. UU. durante la próxima temporada de gripe. La efectividad de las vacunas contra la influenza varía según varios factores, como la edad y la salud del receptor, los tipos de virus de influenza circulantes y el grado de similitud entre los virus circulantes y los incluidos en la vacuna.

La tarea de producir una nueva vacuna para la próxima temporada de gripe comienza mucho antes de que finalice la temporada actual. Para la FDA, es una iniciativa que dura todo el año.

La vacuna contra la gripe activará el sistema inmunitario para que produzca anticuerpos que lo protejan contra la enfermedad de la influenza; no lo enfermará de gripe. Pueden transcurrir aproximadamente dos semanas después de la vacunación para que los anticuerpos se desarrollen en el cuerpo, lo cual es un motivo importante para recibir la vacuna contra la gripe de forma temprana, antes de que comience la actividad de la gripe.

Por qué necesitamos nuevas vacunas contra la gripe cada año

Hay varias razones por las que se debe elaborar una nueva vacuna contra la gripe cada año.

Los virus de la gripe pueden cambiar de un año a otro, por lo que la vacuna se actualiza para proteger contra las cepas del virus de la influenza que se espera que circulen en los EE. UU. Además, la protección proporcionada por la vacuna contra la gripe que recibió una persona en el año anterior disminuirá con el tiempo y puede ser demasiado baja para prevenir la enfermedad de la influenza en la temporada de gripe del próximo año.

Quién corre más riesgo de enfermarse con gripe

Por lo general, los niños y las personas mayores corren mayor riesgo de enfermarse de influenza. La mejor manera de proteger a los bebés que son demasiado pequeños para vacunarse es asegurarse de que las personas que los rodean estén vacunadas. En ocasiones, circula un virus de la gripe que afecta de manera desproporcionada a adultos jóvenes y de mediana edad.

También puede reducir la propagación de la gripe y sus efectos tomando medidas prácticas como lavarse las manos, cubrirse la boca al toser y estornudar, y quedarse en casa cuando está enfermo.

La FDA ha aprobado numerosas vacunas para la prevención de la influenza. Pero si contrae gripe, hay medicamentos antivirales aprobados por la FDA, disponibles con receta, para tratarla. Existen varios medicamentos antivirales aprobados por la FDA recomendados por los CDC para su uso contra los virus de la influenza circulantes. Estos fármacos funcionan mejor si se inician poco después de la aparición de los síntomas (dentro de las 48 horas).

Cómo se seleccionan las cepas del virus de la vacuna contra la gripe

Cada año, a fines de febrero o principios de marzo, antes de que finalice la temporada de gripe de ese año, la FDA, la Organización Mundial de la Salud (OMS), los CDC y otros expertos en salud pública colaboran para recopilar y revisar datos de todo el mundo para identificar los virus de la gripe que probablemente causen la mayor cantidad de enfermedades durante la próxima temporada de gripe.

Después de ese proceso, la FDA convoca a su comité asesor de vacunas, que consta de expertos externos, para analizar las recomendaciones de la OMS y considerar cuáles virus de la gripe se espera que circulen en los EE. UU. El comité revisa los datos sobre cuáles virus de la gripe han causado enfermedades en el último año, cómo cambian los virus, y tendencias de la enfermedad para los EE. UU. La FDA tiene en cuenta esa información antes de seleccionar las cepas del virus para que los fabricantes con licencia de la FDA las incluyan en sus vacunas para su uso en los EE. UU.

Cuanto más cercana sea la coincidencia entre las cepas del virus elegidas para la vacuna y las cepas circulantes que causan la enfermedad durante la temporada de gripe, mejor será la protección que proporciona la vacuna contra la gripe. Aunque la vacuna y los virus pueden no ser exactamente compatibles en algunos años, eso no significa que la vacuna no esté beneficiando a las personas. Los datos disponibles muestran que la vacuna puede reducir la gravedad de la enfermedad en personas que se vacunan pero que aún se enferman.

La vacuna contra la gripe es segura

Para garantizar que la vacuna contra la gripe sea segura, eficaz y de alta calidad, la FDA prepara y proporciona reactivos (materiales para estandarizar las vacunas) a los fabricantes, necesarios para fabricar su vacuna y verificar su identidad y potencia. La FDA también inspecciona regularmente las instalaciones de fabricación y evalúa cada vacuna del fabricante anualmente antes de que pueda ser aprobada para su uso en la próxima temporada de gripe.

La supervisión de la FDA no termina allí. Después de que los fabricantes han distribuido sus vacunas para su uso por parte del público, la FDA y los CDC trabajan juntos para evaluar rutinariamente los informes de eventos adversos después de la vacunación presentados por los fabricantes de vacunas, los profesionales de atención médica y los receptores de vacunas (o sus padres/tutores) al Sistema de informe de eventos adversos de vacunas (Vaccine Adverse Event Reporting System, VAERS).

Existen sistemas adicionales para monitorear la seguridad de las vacunas. La FDA se asocia con organizaciones privadas que recopilan datos de atención médica (como compañías de seguros médicos) y otras agencias federales (como los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid, la Administración de Salud para Veteranos y los CDC) para evaluar aún más la seguridad y la efectividad de las vacunas contra la influenza y otras vacunas que la FDA ha aprobado o autorizado para uso de emergencia. 

La Iniciativa de efectividad y seguridad biológica (Biologics Effectiveness and Safety, BEST) es uno de los programas que la FDA utiliza para evaluar la seguridad y la efectividad de las vacunas en afecciones del mundo real, lo que refleja la atención al paciente y el uso real de la vacuna contra la influenza y otras vacunas en los EE. UU. Además, los CDC mantienen el programa de Enlace de datos de seguridad de las vacunas (Vaccine Safety Datalink, VSD), que evalúa la seguridad de las vacunas de manera similar a la Iniciativa BEST. El VSD recibe sus datos de nueve organizaciones de atención médica integradas en los EE. UU.