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Los tatuajes son más populares que nunca. Según una encuesta realizada por Harris Poll en 2015, aproximadamente 3 de cada 10 (o 29%) personas encuestadas tienen por lo menos un tatuaje. La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) también ve las denuncias de personas que están contrayendo infecciones a causa de tinta para tatuajes contaminada, así como presentando reacciones adversas a la tinta misma.

A lo largo de los años, la FDA ha recibido cientos de informes sobre efectos adversos relacionados con los tatuajes: 363 entre 2004 y 2016.

Antes de hacerse un tatuaje, tome en consideración estas preguntas clave a las que responde la Dra. Linda Katz, M.D., M.P.H., directora de la Oficina de Cosméticos y Teñidos de la FDA.

1. ¿Debería preocuparme por las prácticas inseguras o por la tinta para tatuar en sí misma?

Por ambas cosas. Aunque uno puede contraer infecciones graves debido a prácticas higiénicas y equipo sin esterilizar, éstas también pueden ser producto de tinta contaminada con bacterias o moho. El uso de agua sin esterilizar para diluir los pigmentos (los ingredientes que añaden el color) suele ser uno de los causantes, aunque no el único.

No hay forma de saber a ciencia cierta si la tinta es segura. Una tinta puede estar contaminada, incluso si el envase está sellado o si la etiqueta dice que el producto es estéril.

2. ¿Qué contiene la tinta para tatuar?

Estudios publicados han informado que algunas tintas contienen pigmentos utilizados en tóneres para impresoras o en pinturas automotrices. La FDA no ha aprobado ningún pigmento para inyectarse en la piel con fines cosméticos.

La FDA verifica las denuncias de los consumidores y los prestadores de servicios de salud sobre infecciones o reacciones adversas. Quizás nos enteremos de ciertos brotes gracias a las autoridades estatales que vigilan a los salones de tatuajes.

3. ¿Qué tipo de reacciones pueden presentarse después de hacerse un tatuaje?

Usted podría notar un sarpullido —enrojecimiento o protuberancias— en la zona del tatuaje y presentar fiebre.

Las infecciones más agresivas pueden causar fiebre alta, temblores, escalofríos y sudoración. Para el tratamiento de estas infecciones podrían necesitarse diversos antibióticos —posiblemente durante meses— o incluso una hospitalización o cirugía. El sarpullido también puede significar que está teniendo una reacción alérgica. Y como las tintas son permanentes, la reacción puede persistir.

Acuda a su profesional de la salud si algo le preocupa.

4. ¿Puede presentarse una acumulación de tejido cicatricial después de hacerse un tatuaje?

Es posible que se forme tejido cicatricial al hacerse un tatuaje o que se presenten “granulomas”, los cuales son pequeños nódulos o protuberancias que pueden formarse alrededor de cuerpos que el organismo percibe como extraños. Si tiende a la formación de queloides —cicatrices que crecen más de lo normal—, pueda que manifieste el mismo tipo de reacción al tatuaje.

Algunas personas pueden experimentar hinchazón o ardor en la zona del tatuaje al sacarse una tomografía por resonancia magnética (TRM o MRI, como se le conoce también por sus siglas en inglés), aunque esto rara vez sucede y no dura por mucho tiempo. Déjele saber a su profesional de la salud que tiene un tatuaje antes de ordenar una tomografía.

6. ¿Y qué hay de las tintas y los kits para tatuarse uno mismo?

Las tintas y los kits que se venden a los consumidores como “caseros” o para “tatuarse uno mismo” se han relacionado con infecciones y reacciones alérgicas. A la FDA también le preocupa que los consumidores tal vez no sepan cómo controlar y evitar todas las fuentes de contaminación.

7.  ¿Podrían presentarse otros problemas más adelante?

Aunque las investigaciones están en curso en la FDA y en otros lugares, aún hay muchas interrogantes sobre los efectos a largo plazo de los pigmentos, los demás ingredientes y los posibles contaminantes presentes en las tintas para tatuar. La FDA ha recibido informes sobre reacciones adversas a la tinta de los tatuajes justo después de hacerse uno e incluso años después. Y también podría volverse alérgico a otros productos, como los tintes para el cabello, si su tatuaje contiene parafenilendiamina (PFD).

Luego está la eliminación de tatuajes. Desconocemos las consecuencias a corto o a largo plazo de cómo los pigmentos se descomponen después de un tratamiento con láser. Sin embargo, sí sabemos que algunos procedimientos de eliminación de tatuajes pueden dejar cicatrices permanentes.

8.  Si me hago un tatuaje y contraigo una infección o presento otra reacción, ¿qué debo hacer?

Primero que nada, acuda a su profesional de la salud.

En segundo lugar, notifique al tatuador para que él o ella pueda identificar la tinta y dejar de usarla. Pregunte por la marca, el color y cualquier número de lote de la tinta o diluyente para ayudar a determinar el origen del problema y cómo tratarlo.

En tercer lugar, ya sea usted un consumidor, un tatuador o un profesional de la salud, hágaselo saber a la FDA. Proporcione tantos detalles como sea posible acerca de la tinta, la reacción y la consecuencia. Las denuncias de los consumidores son una de nuestras fuentes de información de seguridad más importantes.

Eliminar los tatuajes puede ser más difícil de lo que cree

Así que piénselo antes de hacerse un tatuaje; sopese los riesgos.

Además, recuerde que la eliminación de un tatuaje es un proceso laborioso y que quizás sea imposible completarla sin dejar cicatriz.

Si decide hacerse un tatuaje, asegúrese de que el salón y el artista cumplan con las leyes tanto locales como estatales. La Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales tiene una página de internet sobre los requisitos estatales para el tatuado. Para obtener información sobre las normas locales, comuníquese con el departamento de salud de su ciudad o condado.

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