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Las tortugas son portadoras habitales de bacterias en las superficies externas de la piel y su caparazón que pueden enfermar gravemente a las personas. Los gecos y los dragones barbudos también pueden infectar a las personas.

Las tortugas comúnmente portan la bacteria de la Salmonella en la superficie de la piel y el caparazón. Los reptiles como los gecos y los dragones barbudos también pueden infectar a las personas con Salmonella. Estas pequeñas criaturas de ojos vidriosos pueden parecer bonitas e inofensivas, pero las tortugas y los reptiles pequeños como los dragones barbudos y los gecos pueden enfermar gravemente a las personas.

Las personas pueden contraer Salmonella al entrar en contacto con:

• Tortugas y otros reptiles (lagartos, serpientes);
• Anfibios (ranas, salamandras, tritones); y
• Los hábitats de reptiles o anfibios, como jaulas, tanques y peceras.

La Salmonella puede causar una infección grave o incluso mortal en las personas, aunque la bacteria no enferma a los reptiles o anfibios. El 23 de febrero de 2021, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades anunciaron el último brote relacionado con las tortugas más pequeñas, que hasta ahora ha causado 22 enfermedades y una muerte.

Las personas infectadas con Salmonella pueden tener diarrea, fiebre, dolor de estómago, náuseas, vómitos y dolor de cabeza. Los síntomas suelen aparecer entre seis y 72 horas después del contacto con la bacteria y duran entre dos y siete días. La mayoría de las personas se recuperan sin tratamiento, pero algunas pueden enfermarse tanto que necesitan ser atendidas en un hospital.

¿Quién corre el riesgo de contraer una infección por Salmonella?

Cualquier persona puede contraer una infección por Salmonella. Si embargo, el riesgo es mayor en los bebés, niños pequeños, ancianos, y las personas con una resistencia natural baja a la infección a causa del embarazo, el cáncer, el VIH/SIDA, la diabetes, y otras enfermedades. 

“Todos los reptiles y anfibios pueden ser portadores de la Salmonella”, dice Vic Boddie II, Ph. D., responsable de seguridad del consumidor en el Centro de Medicina Veterinaria de la Administración de Alimentos y Medicamentos. “Y si los niños entran en contacto con tortugas pequeñas, corren el riesgo de enfermarse gravemente”.

“Aunque una tortuga pequeña no parezca estar enferma, puede ser portadora de la Salmonella, que podría enfermar a los niños pequeños”. Y, desafortunadamente, los niños se infectan a sí mismos sin saberlo”, afirma Boddie. “Los niños tienden a poner a las tortuguitas en su boca, o a jugar en los hábitats de las tortugas y luego se llevan los dedos a la boca. Además, los hábitats de los reptiles se limpian a veces en el fregadero de la cocina, lo que podría contaminar de forma cruzada los alimentos y los utensilios para comer, lo que puede ser un riesgo grave tanto para los niños como para los ancianos”.

Las superficies como los mostradores, las mesas, los pisos descubiertos y las alfombras también pueden contaminarse con la bacteria si se deja que la tortuga camine sobre estos. La bacteria puede sobrevivir durante mucho tiempo en esas superficies. Las practicas adecuadas de manejo e higiene son extremadamente importantes para prevenir la propagación de la bacteria y mantener la salud de usted y su familia.

Infección por las tortugas y los dragones barbudos

En cuatro brotes entre el 1 de marzo de 2017 y el 23 de febrero de 2021, las tortugas mascotas fueron la fuente probable de infección por Salmonella en 137 personas, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) (en inglés). Estos cuatro brotes fueron atribuidos a Salmonella Typhimurium en tortugas mascotas pequeñas en 2021, a Salmonella Oranienburg en tortugas mascota en 2019, y a Salmonella Agbeni en tortugas mascotas en 2017. Un paciente murió en el brote de 2021. Entre los 159 que enfermaron, 57 de ellos estuvieron tan enfermos que tuvieron que ser hospitalizados. Al menos 25 niños menores de cinco años estaban entre los que enfermaron.

Las investigaciones mostraron que poco antes de que muchas de las personas enfermaran, estuvieron expuestas a una pequeña tortuga al tocarla, alimentarla, limpiar el hábitat o cambiar el agua del tanque. Casi la mitad de las personas que tuvieron contacto con pequeñas tortugas declararon haber comprado y tocado pequeñas tortugas de un vendedor ambulante o haber recibido a la tortuga como regalo.

Los dragones barbudos también pueden ser la fuente de un brote de Salmonella. Hasta el 20 de noviembre de 2020, los CDC recibieron informes de 18 personas en 11 estados que se infectaron con Salmonella relacionada con los dragones barbudos (en inglés).  Los gecos mascotas también han estado implicados en brotes de Salmonella. Todos los reptiles son portadores de gérmenes de Salmonella en sus excrementos, aunque parezcan sanos y limpios. Estos gérmenes pueden propagarse fácilmente a sus cuerpos, a sus hábitats y a cualquier cosa que se encuentre en su hábitat.

Al igual que en el caso de las tortugas, estos brotes afectaron generalmente a niños, y algunas personas infectadas fueron hospitalizadas. Es muy importante que usted y los miembros de su familia se laven bien las manos con agua y jabón justo después de tocar a los gecos o sus habitats.

Consejos para los consumidores

• No compre tortugas pequeñas ni otros reptiles o anfibios para tenerlos como mascotas o como regalos.
• Si su familia está esperando un bebé, deshágase de cualquier reptil o anfibio de la casa antes de que llegue el bebé.
• Mantenga a los reptiles y anfibios fuera de los hogares con niños menores de 5 años, ancianos o personas con sistemas inmunológicos debilitados.
• No permita que los reptiles o anfibios caminen libremente por la casa, especialmente en las zonas de preparación de alimentos.
• No limpie las peceras u otros suministros en el fregadero de la cocina. Utilice cloro para desinfectar la bañera u otro lugar donde se limpien los hábitats de los reptiles o anfibios.
• Lávese siempre bien las manos con agua y jabón después de tocar cualquier reptil o anfibio, su hábitat o cualquier cosa (por ejemplo, comida) que entre en contacto con el animal o su hábitat.
• Tenga en cuenta que la infección por Salmonella puede producirse por el contacto con reptiles o anfibios en zoológicos donde se puede acariciar a las mascotas, parques, guarderías u otros lugares.
• Esté atento a los síntomas de la infección por Salmonella, como diarrea, dolor de estómago, náuseas, vómitos, fiebre y dolor de cabeza. Llame a su médico inmediatamente si tiene alguno de esos síntomas.